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Para invocar a los ángeles
planetarios para pedir su energía y conseguir algo que se desea, se
determina primero cual de los ángeles planetarios rige el deseo de
la persona. El ritual se lleva a cabo en el día regido por el ángel,
en una de las horas regida por su planeta según la tabla que les di
anteriormente' Estas horas son la una de la mañana, las ocho de la
mañana, las tres de la tarde y las diez la noche del día escogido.
La persona lleva cabo la purificación indicada anteriormente por 24
horas. Visualiza un circulo de luz alrededor, que se extiende de
Este a Este de la habitación, rocía un poco de agua de sal alrededor
del circulo para purificarlo de influencias negativas y pasa un poco
del incienso del ángel, moviéndose siempre de derecha a izquierda
según las manillas del reloj, para establecer el flujo de las
energías síquicas que se mueven de forma solar.
En el punto Este debe colocarse una vela amarilla, en el Sur una
vela
roja, en el Oeste una vela azul, y en el Norte una vela verde.
como símbolos de los cuatro elementos, que son aire, fuego, agua y
tierra. Esto es importante porque todo lo que existe esta basado en
estos cuatro elementos y ayuda en la manifestación de lo que se
desea.
La persona que lleva a cabo el ritual debe estar vestida de blanco o
del color del ángel pararse sobre un paño del color del ángel sobre
ese paño debe colocar algunas de los atributos del ángel, como
algunas de sus plantas, su metal y piedras que le corresponden. Esto
ayuda a establecer un eslabón con el consciente que reconoce el
significado de los atributos como perteneciéndoles a ese ángel,
haciendo mas fácil la comunicación con este. También sobre el paño
debe colorarse una pequeña copa de vino dulce y un anicito dulce o
bizcochito. Cuando esta todo listo, la persona se para frente al
Este y dice lo siguiente:
En el nombre del Gran Arquitecto del Universo, por quienes ambos
hemos sido creados, te invoco en paz y amor, Gran Arcángel.
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aquí se pronuncia el nombre del ángel que rige lo que se desea, para
que esto que deseo (mencionarlo que se desea) y que tu riges, sea
realizado en el mundo material, de forma positiva y natural, para mi
mayor provecho y sin peligro alguno para mí o para nadie.
Esto se repite luego en el punto Sur y el Este y se dice:
Que este pan que te ofrezco ayude a manifestar lo que te pido con
prosperidad y alegría en el mundo material.
Cuando se regresa de nuevo al Este, se repiten las palabras de nuevo
y se come el pan con reverencia y gratitud, visualizando mientras se
come que lo que se ha pedido ya esta realizado. Luego se levanta la
copa de vino y se le reza de la misma manera en los cuatro puntos
cardinales y se dice:
Que este vino que te ofrezco ayude a manifestar lo que te pido con
prosperidad y alegría en el mundo material.
Cuando se regresa al Este, se repiten las palabras y se toma el vino
con igual reverencia y gratitud, de nuevo visualizando lo que se
desea como si ya lo hubieran recibido.
Luego se recogen todos los atributos, se envuelven en el paño y se
meten debajo del colchón de la cama o en un sitio que sea visible a
diario a la persona, pero que nadie mas pueda tocar.
Antes de salir del circulo, se dan las gracias a Dios y al ángel en
los cuatro puntos cardinales y se visualiza como este desaparece
dejando en su lugar una gran paz en el ambiente. Las velas se apagan
y se tiran.
Este ritual es de gran eficacia y si se hace con fe y determinación,
lo que se pide se alcanza al poco tiempo y de una forma tan natural,
que les va a hacer pensar que no fue el ritual lo que lo logró sino
un proceso enteramente natural. Esto se debe a que todo lo que se
visualice y se consigue a través del inconsciente es un acto muy
natural que establece relaciones armoniosas con las leyes cósmicas,
a través de las cuales lo que se pide es realizado.
La música durante el ritual ayuda a la concentración y a llevar a la
persona a un estado mas elevado y místico. Por esto se sugiere
escuchar música etérea, que sea vivificante y a la vez excelsa,
durante esta invocación. La música de la Nueva Era es ideal para
este tipo de ritual, de las cuales hay muchas y muy bellas en el
mercado.
Es importante que recuerden que durante toda invocación o ritual a
los ángeles, la Luna debe estar creciente; es decir, entre Luna
Nueva y Luna Llena.
Esto se debe a que durante la Luna Creciente hay mas energías
positivas a nuestro alrededor, las cuales son beneficiosas para el
resultado eventual del ritual, mientras que la Luna Menguante, al
perder luz, crea energías negativas a nuestro alrededor que son
conductivas a retrasos y a resultados negativos en todo ritual.
Este ritual es
mas bien una
meditación
durante la cual
se trata de
establecer
contacto con el
ángel guardián.
Como siempre la
persona se
purifica por 24
horas. Luego se
viste de blanco
y se sienta en
el piso frente
al Este con las
piernas cruzadas
en posición
yoga. A su
alrededor coloca
cuatro cuarzos
blancos de punta
en forma de
cruz, uno al
frente, uno
detrás, y uno a
cada lado, los
cuales ha
limpiado de
antemano,
poniéndolos en
agua de sal de
mar por 24
horas, luego
enjuagándolos y
colocándolos al
sol por seis
horas para
reenergizarlos.
Estos cuarzos no
se programan
para que estén
libres y puedan
canalizar
energías sin
restricción
alguna. Al
frente de la
persona debe
haber un vaso o
copa de agua de
manantial.
Detrás de la
copa se pone una
vela corta
blanca
encendida.
Enseguida se
respira
profundamente
por la nariz, se
aguanta la
respiración
contando hasta 6
y se exhale por
la boca. Esta
respiración, que
se conoce en
yoga como
pranayama, se
repite seis
veces para
relajar el
cuerpo y
prepararlo para
la meditación.
Después de las
pranayamas, se
visualiza un
rayo de luz que
sale del cuarzo
que esta al
frente, el cual
se extiende
hasta el cuarzo
que esta a la
derecha y de ahí
pasa al cuarzo
que esta detrás
y de éste al que
está a la
izquierda,
terminando por
fin en el frente
de nuevo. Esto
forma un circulo
de luz brillante
que pasa a
través de los
cuatro cuarzos.
Luego se deja la
mente en blanco
y se mira a la
llama de la vela
a través de la
copa de agua,
contando hacia
atrás en voz
alta del diez al
uno. Esto pone a
la persona en
estado alfa, que
es el estado de
trance leve que
se usa para
contactar a las
energías del
inconsciente. De
inmediato se
cierran los ojos
y se visualiza
la llama de la
vela sobre el
entrecejo. Tan
pronto se
visualiza la
llama se
comienza a
invocar al
ángel, cuyo
nombre ya se ha
averiguado. El
nombre del ángel
se pronuncia en
voz alta siete
veces lentamente
con los ojos
cerrados. Según
va repitiendo el
nombre del
ángel, la
persona va a
sentir que su
conciencia se va
elevando por
encima de su
cuerpo hasta
quedar unas
pulgadas sobre
este. Esta es
una sensación de
levitación
aparente que no
afecta el cuerpo
en si, sino a la
mente del
individuo.
Cuando termina
de repetir el
nombre del
ángel, si ha
hecho la
meditación de
forma
concentrada, la
persona va a
sentir la
presencia del
ángel como una
gran fuente de
luz y amor que
la rodea y
permea su
esencia
llenándola de
una paz y una
felicidad
indescriptible.
En este estado
de éxtasis, va a
recibir uno o
mas mensajes del
ángel los cuales
llegan a su
mente como si
una voz interior
le estuviera
hablando. Esto
se conoce como
la conversación
con el Ángel
Guardián. La
persona en estos
momentos puede
hacerle
preguntas a su
ángel, quien las
va a contestar
la energía del
ángel permanece
solo por unos
momentos con la
persona y luego
se va a ir
dopando poco a
poco. Cuando el
ángel se va, la
persona siente
que va
descendiendo de
nuevo a su
cuerpo. Cuando
esto sucede,
cuenta de nuevo,
pero esta vez
del uno al diez.
Al llegar al
diez, abre los
ojos y el ritual
ha terminado.
Puede entonces
apagar la vela y
recoger los
cuarzos,
visualizando que
el circulo de
luz se
desvanece. Los
cuarzos se
guardan para
usarlos de nuevo
en rituales
similares. El
agua se puede
tomar ya que
esta llena de
grandes energías
positivas. Este
es un ritual
evocativo muy
sencillo pero
muy poderoso, el
cual deja la
persona en un
estado de paz
muy grande que
dura a veces por
muchos días. Es
recomendable
tener un
cuaderno a la
mano para
escribir
cualquier
mensaje que se
reciba del ángel
durante el
ritual.
Antes de tratar de invocar a un ángel para ayudar a otra persona, es
importante recordar que todo ser humano tiene libre albedrío y que
no nos esta permitido involucrarnos en su vida para tratar de
cambiarla sin su permiso. Se puede enviar energía Angelical a
alguien que esta enfermo, que tiene problemas graves o que esta
pasando por una crisis severa para que esta energía le ayude a
trascender esa enfermedad o crisis por si mismo. Pero no se debe
usar energía Angelical para que esta persona haga algo que nosotros
creemos que debe hacer o queremos que haga y que la persona no haría
por si misma, ya que esto es infringir en su derecho de libertad de
acción.
Una vez que estén seguros de que su intención es la de ayudar y no
de obligar a una persona, pueden llevar a cabo el ritual Angelical
para enviar energías a esta.
Este ritual requiere una foto reciente de la persona. La foto se
coloca sobre un espejo redondo colocado a su vez sobre un paño de
seda o de satén blanco. Se escoge uno de los siete ángeles regentes
planetarios, dependiendo del problema de la persona. Por ejemplo, si
la persona esta enferma se puede utilizar a Miguel, regente del Sol
en el sistema planetario, el cual es el origen de la vida y fuente
de la salud, o a Rafael que es el ángel que sana, conocido como el
medico divino.
Si el ángel que se escoge es Rafael, se rodea la foto con ocho velas
color naranja, ya que el número ocho y el color naranja son
atributos planetarios de Mercurio y de Rafael. Si se escoge a
Miguel, se usan seis velas amarillas porque este es el color
asociado con el Sol y el seis es su número cabalístico. Sobre la
foto se coloca una de las piedras asociadas con ese ángel para
ayudar a establecer contacto con él. Se cierran los ojos y se
visualiza a la persona sana y llena de alegría. Tan pronto se
visualiza a la persona, se repite el nombre del ángel varias veces,
dependiendo de su número. Si es Miguel se pronuncia su nombre seis
veces; si es Rafael, ocho veces. Esto ayuda a canalizar la energía
del ángel hacia esa persona. De inmediato se abren los ojos y se
visualiza un rayo de luz que procede del ángel hasta la piedra que
esta sobre la foto, cuya energía penetra a través de la imagen de la
persona hasta el espejo que se use para enviar la energía a ésta.
Este ritual se debe llevar a cabo en el día asociado con el ángel, a
la una o a las ocho de la mañana, a las tres de la tarde a las diez
de la noche, que son las horas angelicales de cada día. Este ritual
ayuda grandemente a la persona y se puede repetir varias veces para
multiplicar sus energías y esta pueda resolver su problema por si
misma. Si deciden repetir el ritual, recuerden que solo lo pueden
hacer una vez por semana, ya que solo puede ser hecho en el día
regido por ese ángel. Es recomendable dejar la foto sobre el espejo
con la piedra encima mientras la persona resuelve su problema.
Cada día nos
enteramos a
través de los
periódicos, la
radio o la
televisión de
los desastres
continuos que
azotan a nuestro
planeta. Las
guerras y luchas
entre los
distintos
gobiernos se
proliferan
alrededor del
mundo; los
crímenes, las
epidemias, los
desamparados,
las tragedias,
los accidentes,
y los desastres
naturales nos
rodean
continuamente.
Los ángeles son
fuentes in
agotables de
amor y de
energía que
pueden ayudar a
aliviar y a
sanar estas
condiciones, que
son el resultado
del desbalance
de energías
cósmicas a
nuestro
alrededor.
Uno de los
rituales mas
efectivos y
hermosos que se
pueden llevar a
cabo con la
ayuda le los
ángeles es el
que se hace para
enviar energías
positivas a la
Tierra.
Este ritual
requiere un
globo terrestre
o un mapa del
mundo, el cual
se coloca en el
suelo; sobre un
paño blanco.
Alrededor del
globo del mapa
se encienden
siete velas en
los colores de
los ángeles
planetarios:
amarilla por
Miguel; violeta
por Gabriel;
roja por Camael;
naranja por
Rafael; azul
eléctrico por
zadkiel; verde
por Anael; y
azul oscuro por
Casiel. El
ritual se lleva
a cabo durante
siete días,
empezando en
domingo.
La persona se
purifica como
antes les he
explicado y se
viste de blanco.
Tome entre sus
manos un cuarzo
blanco de punta
fina el cual ha
sido limpiado
según
instrucciones
previas y se
sienta frente al
Este. Lleve a
cabo seis
pranayamas ya
descritas y
proceda a quemar
un poco del
incienso Miguel
que rige el
domingo. Ahora,
encienda la vela
amarilla y diga:
"Bien amado
Arcángel Miguel,
regente del
domingo, en
nombre del
Creador del
Universo te pido
que envíes tus
energías
celestiales al
planeta Tierra
que tan
necesitado esta
de Angelical
ayuda".
A continuación,
visualizar un
rayo de luz
divina
descendiendo del
infinito hasta
el cuarzo y de
este al globo o
mapa terrestre,
enviándolo con
sus destellos
deslumbrantes.
la visualización
se mantiene por
varios minutos.
Luego se deja
que la luz se
desvanezca poco
a poco. Tan
pronto se haya
desvanecido
todo, se apaga
la vela. Se dan
las gracias a
Miguel por su
presencia y se
termina el rito.
Al día
siguiente,
lunes, se repite
todo nuevo pero
se encienden las
velas, amarillas
por Miguel y
violeta por
Gabriel y se
invoca a Gabriel
con las mismas
palabras. Se
visualiza la luz
que baja hasta
el cuarzo y de
este a la
Tierra.
El ritual se
continúa todos
los días de la
Semana cada día
encendiendo
todas las velas
anteriores, mas
la vela del
ángel de ese
día. al cual se
invoca de la
misma manera.
El sábado, que
es el último día
del ritual, se
encienden sodas
las velas y esta
vez, se dejan
terminar y no se
apagan. Este
ritual es de
gran beneficio
para el planeta
y si suficientes
personas lo
llevaran a cabo
a menudo, muchas
de las
desgracias que
lo azotan serian
evitadas.
Este ritual se lleva a cabo al aire libre y se
hace para reestablecer contacto con la naturaleza a través de sus
cuatro elementos: aire, fuego, agua y tierra. Los ángeles de los
cuatro elementos son: Aire: Rafael: Fuego: Miguel; Agua: Gabriel; y
Tierra: Uriel.
El ritual del aire se hace un día miércoles en lo alto de una colina
o montaña donde haya bastante viento. Este ritual se hace con un
grupo de tres o mas personas para que sea mas eficaz, aunque puede
ser hecho por una sola persona.
Las personas que toman parte en el ritual deben vestir de blanco o
naranja. Todo lo que requiere es que todos los participantes ciñan
coronas hechas con flores anaranjadas, como crisantemos, claveles o
rosas y carguen un pañuelo color naranja y una varita de incienso de
sándalo o de lavándula. También se les aconseja cargar consigo una
de las piedras regidas por Rafael.
Las personas se toman de la mano y forman un circulo. Así unidas den
la vuelta al circulo ocho veces llamando en voz alta a Rafael. A la
octava vuelta se detienen y encienden las varitas de incienso, las
cuales alzan en alto ya que representan el elemento aire.
La persona que dirige el ritual dice lo siguiente con voz pausada y
las demás repiten sus palabras:
Bien amado Rafael, regente del elemento aire, pedimos tu presencia
en estos momentos entre nosotros para que el poder de tu sagrado
elemento nutra y vivifique nuestros cuerpos y nuestros espíritus en
nombre del Creador de Universo.
En este momento los pañuelos se alzan hacia arriba y se revoletean
para que floten en el viento. Generalmente, si el ritual es hecho
con poder y concentración, el viento aumenta de forma muy marcada al
hacer esto.
Personas que han llevado a cabo este ritual han tenido la
experiencia de que el viento ha aumentado de tal forma hasta llegar
a tomar fuerzas casi huracanadas.
Cuando el viento arrecie, todos se quitan las coronas y deshojan las
flores en el aire, diciendo:
Bienvenido Rafael, tuya es la corona y tuya es la gloria.
Las coronas también se tiran a volar con el viento. Después todos se
sientan en el suelo y comparten bizcochos y vino dulce. Este es uno
de los rituales mas poderosos y vivificante de los que se hacen con
los ángeles de los elementos y todos los que participan en él
mantienen una gran energía y vitalidad durante el resto de la
semana.
Este es un ritual solitario y se hace en tierra plana, donde no haya
mucha vegetación. Para esto se requiere una vela de las que no se
apagan en el aire, de las que se usan para alejar mosquitos y que se
encienden al aire libre.
La persona debe vestir de rojo y cargar una de las piedras regidas
por Miguel. Se sienta frente al sur, que pertenece al elemento fuego
y a Miguel, y enciende la vela, cuya base se en tierra en el suelo.
Luego realice seis pranayamas, concentre su vista en las llamas de
la vela y dice lo siguiente:
"Bien amado Miguel, regente del elemento fuego, te invoco en estos
momentos para reestablecer contacto contigo y con tu elemento para
que este me de las energías necesarias para llevar a cabo mi misión
en la Tierra. Te pido esto en amor y paz, en nombre del Creador del
universo".
En estos momentos, la persona visualiza que entra al centro de la
llama hasta que esta la rodea por completo. La visualización debe
ser lo suficientemente fuerte para que la persona sienta el calor
regenerador del fuego nutriendo todo su organismo, su mente y su
espíritu. Una vez dentro de la llama, sentir la presencia del gran
arcángel que se acerca y la envuelve con una luz inmensa. Permanecer
en este abrazo Angelical por todo el tiempo posible. Luego regresar
mentalmente al mundo material, y a la luz de la llama, comerse un
panecito dulce o un bizcochito y tomar una copita de vino dulce
Durante estos rituales siempre se come y se toma algo para anclar
las fuerzas del ángel. Después se apaga la vela en el suelo sin
soplarla. Este ritual da una gran energía a la persona y es
especialmente recomendado para individuos que se sientan débiles o
que estén enfermos.
Este ritual se lleva a cabo en la playa, frente al mar. La persona
debe vestir de violeta o de plateado y cargar una de las piedras de
Gabriel, preferiblemente una piedra de la Luna. De pie frente al
Oeste, abrir los brazos y decir estas palabras:
"Bien amado Gabriel, regente del elemento del agua, todo ser
viviente en la Tierra procede del mar, que es la madre de la vida.
Yo te invoco en este momento, en nombre del Creador del Universo, y
te pido que me des un poco de tu radiante energía celestial para que
mi vida fluya, serena y pacifica, como el mar en calma".
Una vez dicho esto, entrar al mar hasta que solo los pies sean
bañados por las olas. Abrir los brazos de nuevo y sentir como de las
aguas del mar sube hacia ustedes una inmensa luz que inunda todo su
ser y los llena de un profundo amor y regocijo. Amar al mar como su
madre espiritual y sentir que sus aguas les acarician los pies como
un beso maternal. Sentir la presencia Angelical de Gabriel rodearlos
de una gran ternura. Generalmente, cuando se hace este ritual, las
aguas del mar suben mas allá del limite de su marea y por esto no se
debe entrar al agua mas allá de los tobillos.
Este ritual da una gran paz la cual permanece con la persona por
largo tiempo. Después salir del mar, se debe comer el bizcochito y
tomar la copa de vino, frente a las aguas.
Este ritual se lleva a cabo en un bosque o en un sitio donde haya
muchos árboles, como un bosque. Es excelente para personas que están
deprimidas, nerviosas o débiles. La persona que hace el ritual debe
vestir de verde y cargar la piedra verde como un jade o una
malaquita, que también le pertenecen a Uriel. Debe llevar consigo
una canasta con migajas para los pájaros y nueces para las ardillas.
Manzanas y otras frutas deben formar parte de esta ofrenda a la
naturaleza y sus criaturas. Una vez en el bosque o parque, se escoge
un árbol grande, de tronco ancho, como un roble o un pino, y a sus
pies se extiende un pañuelo verde, donde la persona se sienta, con
su espalda contra el tronco del árbol.
Una vez sentada, se relaja y hace seis pranamas y dice lo siguiente:
"Bien amado Uriel, regente del elemento
Tierra, en nombre del Creador del Universo, te
invoco para que viertas sobre mi espíritu
atribulado por las pruebas de la vida,
tu divina esencia regeneradora, para que
según crecen las plantas de la madre Tierra,
así crezca mi espíritu en serenidad, paz, y
salud física, mental y espiritual".
Cerrar los ojos y visualizar una inmensa luz que desciende del
infinito sobre el árbol, y a través del tronco de este hacia el
cuerpo de la persona.
Sentir la gran energía vivificante y generosa del árbol extenderse
por todo su cuerpo, su mente y su espíritu. En breves momentos,
sentir la presencia sublime del gran arcángel envolverlos en su
manto de amor divino. Permanecer en este abrazo celestial por el
mayor tiempo posible. Luego sacar las ofrendas de la canasta y
tirarlas a su alrededor sin moverse de su posición debajo del árbol.
Ahora diga lo siguiente:
"Bien amada Madre Tierra, según yo nutro a tus criaturas, nútreme tu
a mí con tu gran amor y compasión. Cura mi cuerpo y mi espíritu y
lléname de tus amplias energías cósmicas".
Comer el bizcochito y tomar el vino y llevarse el pañuelo y la
canasta al terminar el ritual. El resultado de este ritual es una
gran estabilidad y paz que ayuda a fortalecer grandemente el sistema
nervioso central de la persona.
Un baño lustral
es un baño
ritualistico que
se lleva a cabo
con algunas de
las plantas o
flores asociadas
con los ángeles
planetarios y
sus colores en
su día
especifico.
Las plantas se
colocan en una
bolsa grande del
color asociado
con el ángel. Se
llena la bañera
con agua
bastante
caliente y se le
añade color
vegetal para
teñir las aguas
del color del
ángel planetario
escogido. Hay en
el mercado baños
de colores
terapéuticos que
se usan en la
terapia de color
y que son parte
de la Nueva Era.
Estos han sido
creados para
usar en baños
lustrales para
que la persona
reciba en su
aura el color
que mas
necesita. Estos
baños de colores
son perfectos
para los baños
de los ángeles.
Una vez que el
baño ha tomado
el color regido
por el ángel, se
sumerge la bolsa
con las plantas
o flores adentro
de este. También
se le puede
añadir al baño
uno de los
perfumes de
incienso
asociados con el
ángel.
La persona entra
en el baño y
flota sobre las
aguas varias
velas flotantes
en forma de
flores.
estrellas
blancas que son
comunes en el
mercado, en el
número
perteneciente al
ángel. Luego
enciende un poco
de incienso del
ángel escogido,
se relaja y
comienza a
invocarlo
mentalmente y a
pedir que a
través de sus
energías el baño
limpie y nutra
el aura de la
persona.
Visualizar que
la luz de las
velas llena la
bañera de luz y
que esa luz,
junto con el
poder de las
plantas, la
penetra por
todos los poros.
Permanecer en el
baño por medía
hora y luego
vaciar el agua,
visualizando que
con el agua se
van por el
desagüe todos
los problemas y
dificultades que
puedan estar
enfrentando. Al
salir del baño,
se da las
gracias al ángel
y se enciende
una vela de su
color.
El amuleto Angelical se prepara del color del ángel
planetario y3lleva en su interior varias de sus piedras, su metal,
sus plantas y un poco de uno de sus inciensos. Se lleva a cabo en el
día regido por el ángel y en una de las horas planetarias ya
mencionadas. Luego de ser preparado se debe purificar en los cuatro
elementos. Esto se hace de la siguiente manera.
Primero se pasa la bolsita por el humo del incienso del ángel, el
cual simboliza el elemento aire y se dice:
En nombre del gran Arcángel Rafael yo te consagro en el elemento
aire.
Luego se pasa rápidamente por encima de la llama de una vela roja
como símbolo del elemento fuego y se dice:
En nombre del gran Arcángel Miguel yo te consagro en el elemento
fuego.
Luego se rocía con un poco de agua de manantial y se dice:
En nombre del gran Arcángel Gabriel, yo te consagro en el elemento
agua.
Y por fin, se coloca sobre un poco de sal de mar y se dice:
"En nombre del gran Arcángel Uriel, yo te consagro en el elemento
tierra.
La sal es comúnmente reconocida como un símbolo del elemento Tierra.
Es importante recordar que todos estos rituales, incluyendo los
baños y los amuletos, se deben hace en Luna creciente para mayor
eficacia".
Este es un ritual de evocación muy conocido y lo doy aquí
recordándoles que solo es recomendable para aquellas personas con
espíritu recio, que no se atemorizan fácilmente. No, es para los
nerviosos ni los impresionables. Es un ritual para el amor, pero no
para obligar a alguien a que los ame a la fuerza. Esto no pertenece
al ámbito de los ángeles, donde la voluntad humana es altamente
respetada como regalo divino. Para eso existe la magia natural o
básica, donde solo existe la voluntad de la que la practica. Este
ritual es para saber lo que es el amor, como sentirlo y hacerlo
sentir a otras personas, sin doblegar libre albedrío.
Varias versiones de este ritual han sido publicadas en varios
libros, pero su creador original fue el gran ocultista alemán, Franz
Bardon. La versión que voy a dar aquí ha sido simplificada para una
audiencia con poca o ninguna experiencia en la llamada magia
Angelical o planetaria.
Los ingredientes del ritual son los siguientes:
* un incensario con un carboncito encendido.
*canela en polvo.
*un bombillo verde colgando en el medio de la habitación.
*una varita mágica con punta de cristal, comunes en la Nueva Era.
*un pedazo de papel verde cortado en forma de heptagonal (siete
lados) en el cual se ha dibujado con tinta verde el sello de Hagiel
de alrededor de 7 pulgadas de largo (unos l6 cms.).
*una túnica verde.
*un collar hecho por la persona de un alambre de cobre del cual
cuelga un jade o una malaquita.
. un pedazo de tela verde cortada en forma de triangulo de alrededor
de tres pies de largo l metro.
El ritual se celebra un viernes a las díez de la noche, en Luna
Creciente. La persona empieza por purificarse por 24 horas como ya
les he indicado. Se baña y se perfuma con un poco de aceite o
esencia de canela.
Se viste con una túnica verde y se coloca el collar de cobre con el
jade o malaquita al cuello. Enciende el bombillo verde que es la
única iluminación que debe tener el cuarto, el cual debe estar
completamente impregnado de luz verde, sin la cual no puede
funcionar el ritual. Procede a rociar un poco de agua con sal
alrededor de la habitación para purificarla de influencias
negativas. Al Este del circulo coloca el triangulo de tela verde y
en el centro pone el papel con el sello o sigilo de Hagiel. En cada
punta del triangulo coloca una vela verde para altar mayor energía a
la visualización. Al mismo tiempo se coloca la canela sobre el
carboncito que ya debe estar encendido.
No se use mucha canela para evitar un acceso de tos durante el
ritual.
El incensario se pasa alrededor del circulo de Este a Este de nuevo.
Ahora la persona tome la varita mágica en la mano derecha, la cual
ya ha sido consagrada de antemano en los cuatro elementos, según se
purifican los talismanes de los ángeles. Con la varita en la mano,
la persona apunta hacia el Este y traza con su imaginación un
circulo de luz alrededor del cuarto, también de Este a Este, en
nombre del Creador, pidiendo que ninguna influencia oscura pueda
penetrar en el cuarto. Siempre con la varita en la mano derecha
camina hacia el triangulo y sigue con la punta de la varita el
diseño del sello de Hagiel que esta inscrito sobre el heptagono.
Luego regresa al centro del circulo y de frente al triangulo,
comienza a evocar a Hagiel para que se manifieste visiblemente en
este. La primera vez la invoca siete veces mentalmente, visualizando
como esta desciende de su esfera de Venus hasta el triangulo. La
evocación se hace con fuerza y sin temor. La segunda vez la evoca en
voz baja, casi inaudible, también siete veces. La tercera vez la
invoca en voz alta, siete veces, pidiéndole que se materialice
visiblemente dentro del triangulo. Durante todo el tiempo la varita
debe estar apuntando hacia el triángulo. Si la persona ha seguido
todos los pasos del ritual con exactitud y con gran fuerza de
voluntad, la imagen de Hagiel va a comenzar a hacerse visible en el
triangulo. Como les he explicado anteriormente, esta imagen es una
proyección mental de la persona que lleva a cabo el ritual y es muy
real.
Hagiel se presenta como una mujer muy bella con cabellos color rojo
como el tomate, piel blanca como la leche, vestida con una túnica
verde con adornos dorados. Sobre la cabeza lleva una corona real de
tonos cobrizos. Su voz es musical y su actitud gentil y amable. La
impresión causada por una manifestación de este tipo es naturalmente
estupefaciente, sobre todo la primera vez que se tiene la
experiencia. Pero es importante permanecer serenos y continuar con
el ritual. En estos momentos, se le hace a Hagiel la petición que se
desea. Si ella accede a lo que se le pide, es seguro que lo que se
desea se convierte en realidad.
Si Hagiel no aparece en el triangulo, no ha habido suficiente fuerza
en el ritual, pero algún tipo de fenómeno se va a hacer sentir, como
ruidos o músicas extrañas, vibraciones u oscilaciones de la luz.
Esto es creado por las grandes cantidades de energías síquicas
proyectadas del inconsciente de la persona. Una vez que Hagiel
aparece o es obvio que no va a aparecer, se termina el ritual. Si
Hagiel aparece, se le da las gracias por su manifestación y se le
pide que regrese a su esfera de Venus. Cuando la imagen desaparece,
se disuelve la luz del circulo con la varita mágica y se apagan las
velas y el bombillo verde, encendían todas las luces normales. Luego
se recogen todos los implementos y se guardan. Este ritual deja a la
persona que lo lleva a cabo en un estado de gran euforia y alegría,
y a la vez con un gran sentido de armonía mental. Física. En la
mayor parte de las veces, lo que se pide se logra al poco tiempo de
haberse hecho el ritual.
La magia Angelical es una de las formas mas bellas y efectivas de
contactar a las fuerzas de luz que son los ángeles. Todo tipo de
ritual es natural para el ser humano, cuya vida entera esta basada
en actos ritualisticos desde cepillarse los dientes por la mañana
hasta acostarse a dormir por la noche. El ritual del ángel es la
forma mas perfecta de establecer contacto con la naturaleza y con la
Fuerza Creadora del universo.
Existe otro ritual a través del cual se puede saber cual es el
nombre del Ángel Guardián y conversar con el. Para esto se necesita
preparar espejo de amatista. Este es un cristal redondo,
transparente de alrededor de seis pulgadas de diámetro (unos l5
CMS.) que se puede conseguir fácilmente en una cristalería. También
puede usar el cristal de un marco de cuadro barato. Este cristal se
pinta por uno de sus lados con pintura color violeta o morada.
cuando este seca la pintura, se le pega una amatista en cada extremo
del cristal formando una cruz. Las amatistas deben ser colocadas en
la parte del cristal que no esta pintada, pero que refleja una
superficie violeta.
Una vez que el espejo ha sido preparado de esta forma, se consagra
colocándolo sobre un paño violeta sin usar. El espejo se cubre del
todo con sal de mar por veinticuatro horas. Esto lo purifica y a la
vez lo consagra en el elemento tierra que es simbolizada por la sal
Cuando se cubre el espejo de sal se dice:
En Nombre del Creador del Universo y de sus ángeles, te consagro y
purifico en el elemento tierra.
Luego se le saca la sal y se rocía con agua de los ángeles o con
agua bendita para consagrarlo en el elemento agua. Al rociarlo se
dice:
En Nombre del Creador del Universo y de sus ángeles, te consagro y
purifico en el elemento agua.
Para consagrarlo en el elemento fuego, se enciende una vela color
violeta y se pasa a través del espejo en forma de cruz, de una
amatista a la otra. Se dice:
En Nombre del Creador del Universo y de sus ángeles, te consagro y
purifico en el elemento fuego.
Por ultimo se consagra en el elemento aire pasándolo sobre un
incensario con incienso, mirra y flor de lavandula y se dice:
En el Nombre del Creador del Universo y de sus ángeles, yo te
consagro y purifico en el elemento aire.
Después que el espejo ha sido consagrado nadie mas que su dueño
podrá tocarlo. Cuando no este en uso, se guarda en un sitio seguro
envuelto en el paño violeta.
El espejo de amatista se usa para saber los nombres de los ángeles y
establecer contacto con ellos, especialmente el ángel guardián de la
persona. Se usa el color violeta y las amatistas porque este color
es el rayo mas alto que existe en el espectro solar y el que conecta
la corona de la cabeza con las fuerzas de alta jerarquía espiritual.
En el sistema de los chacras representa el séptimo chacra o centro
vital que también esta conectado con la corona de la cabeza.
Antes de usar el espejo, la persona debe haber ayunado por 24 horas,
absteniéndose de relaciones sexuales, licor, tabaco y todo tipo de
drogas. El ayuno es importante porque el estómago no debe estar
lleno durante ningún ritual y la abstención ayuda a concentrar la
atención de antemano en lo que se desea conseguir en el ritual. Las
relaciones sexuales se evitan porque desperdician energías y esto
disminuye el poder de la persona que va a hacer el ritual. La pureza
de mente y de cuerpo son de importancia intrínseca en todo contacto
con los ángeles.
El ritual se debe llevar a cabo solo en Luna Creciente y nunca en
sábado. La mejor hora para hacerlo es la medianoche. La persona debe
estar vestida de blanco y descalza. El lugar se despoja de
vibraciones negativas rociándolo con agua y sal de mar. Luego se
pasa incienso y mirra con flores de lavándula. Inmediatamente se
hace un circulo invisible alrededor del cuarto con un cuarzo blanco,
el cual se ha limpiado con agua y sal de mar y programado para
llevar a cabo purificaciones de este tipo. El circulo se forma
empezando y terminando en el Este para proteger a la persona de
fuerzas negativas. Al hacer el circulo se dice:
En Nombre del Creador del Universo y los cuatro grandes Arcángeles,
Rafael, Miguel, Gabriel y Uriel yo sello este círculo en luz y paz.
Después que el circulo ha sido sellado la persona se sienta en el
suelo sobre una sábana blanca cubierta con pétalos de rosas blancas.
Las luces se apagan de antemano. Sobre la sábana, frente a la
persona, se coloca el paño violeta con el espejo amatista. A su
alrededor se encienden cuatro velas cortas color violeta en forma de
cruz. Luego se dice:
"En Nombre del Creador del Universo, yo pido a mis ángeles
guardianes que
se revelen ante mí en este espejo sagrado de amatista, en el rayo
violeta.
Amen".
A continuación cierre los ojos, relájese y respire profundamente,
inhalando por la nariz contando hasta cuatro, aguantando la
respiración haciendo el mismo conteo y exhalando también en conteo
de cuatro. Esta respiración se conoce como pranayama. Repita lo
anterior seis veces. Inmediatamente después empiece a contar hacia
atrás, del diez al uno. Esto pone a la persona en un leve trance, en
lo que se conoce como estado alfa, cuando es mas fácil contactar las
fuerzas del Inconsciente.
Al llegar al número uno, levántese y diga:
Mi Ángel de la Guarda, que velas principalmente por mi, revélame tu
nombre y tu rostro divino en nombre de Nuestro Creador.
Coloque de inmediato la mente en blanco, y espere. Casi al instante
va a llegar a la mente el nombre del ángel. El primer nombre que se
perciba es el nombre del Ángel Guardián. Es importante no analizar
el nombre, sino aceptarlo sin duda alguna.
Tan pronto se recibe el nombre del ángel, se abren los ojos y se
mire al espejo, visualizando una luz violeta que refulge sobre su
superficie. En el medio de esta luz se forma el rostro o imagen del
Ángel Guardián. Diga a continuación:
Gracias, ángel mío
y mencione su nombre. En estos momentos se pide un mensaje al ángel
o se le pide ayuda en algo que se desea o necesita. Coloque de nuevo
su mente en blanco y recibirá la respuesta del ángel. Esto también
se conoce como la conversación con el Ángel Guardián. de esta manera
se le pueden hacer preguntas al ángel y recibir su respuesta.
Naturalmente no es aconsejable hacer preguntas inapropiadas o que
puedan ser ofensivas a un espíritu de alta jerarquía. La
conversación con ángel Guardián debe ser usada para ayudar la
evolución espiritual de la persona o en acciones materiales sobre
las cuales la persona no tiene control y que se esperan peligros
para ella o sus seres queridos. El contacto no debe pasar de quince
minutos.
Cuando el ángel ha contestado las preguntas, se le dan las gracias y
se apagan las velas. antes de recoger el espejo y la sábana, se toma
eI cuarzo de nuevo y se hace un nuevo circulo diciendo:
En Nombre del Creador del Universo y de sus grandes Arcángeles
Rafael, Miguel, Gabriel, Uriel yo desvanezco este círculo en luz y
paz. Este ritual ha terminado.
El cuarto se recoge y se guarda todo para usarlo en otra ocasión.
Los pétalos se echan a volar por una ventana.
La Luna tiene muchos nombres místicos, los cuales le han sido
adjudicados a través de muchos siglos. El nombre hebreo de la Luna
es Levanah y en el Árbol de la Vida es esta luminaria la que abre el
camino que asciende a las esferas superiores y a las puertas del
cielo. Es por esto que la Luna es considerada de gran importancia en
meditaciones y en la practica del misticismo. Tal vez debido a su
obvia conexión con el Inconsciente y con altos estados de
conciencia, la Luna siempre ha sido el eje sobre el cual se balancea
el poder de todo ritual mágico.
En tiempos antiguos los meses estaban basados en las fases lunares y
muchos calendarios, como el chino y el hebreo están basados en los
movimientos de este satélite terrestre. Los judíos ortodoxos
celebran cada Luna Nueva con rituales específicos que incluyen la
lectura del salmo 8l, el cual menciona la importancia de esta fase
lunar. Es importante tener un calendario que indique la hora exacta
de la Luna Nueva en el lugar de residencia de la persona, ya que
Dios escucha toda plegaria que se haga en ese momento. La presencia
de Dios permanece con la persona solo durante cinco minutos después
de entrar la Luna Nueva. En este intervalo se lee el salmo 8l y se
hace la petición a Dios.
La Luna pasa por todos los signos zodiacales en el curso de un mes,
permaneciendo en cada uno entre dos a dos días y medio. Los
veintiocho días del ciclo lunar se conocen como las mansiones de la
Luna.
El periodo entre Luna nueva y Luna Llena se conoce como Luna
Creciente. Entre Luna Llena y la próxima Luna Nueva se conoce como
Luna Menguante.
El efecto de la Luna sobre la tierra es tal que los agricultores
utilizan las diferentes etapas lunares para plantar y recoger
cosechas. Los jardineros profesionales también observan las fases de
la Luna. Todas las religiones y las llamadas culturas primitivas
como las del Indio americano, los aborígenes australianos y muchas
tribus africanas observan los aspectos de la Luna.
La Luna Menguante siempre ha sido considerada maléfica ya que esta
perdiendo luz continuamente y es durante esta fase que se llevan a
cabo las practicas de la magia negra o magia de destrucción. La Luna
Creciente, por otra parte, es considerada benéfica porque cada noche
adquiere mas luz y crece mas en el firmamento. Es durante esta época
que se llevan a cabo rituales de magia blanca o magia positiva.
En la magia Angelical, la Luna Nueva y Luna Llena son de gran
importancia. En Luna Nueva y Luna Llena se llevan a cabo
meditaciones y rituales durante los cuales la persona trata de
elevarse a planos superiores que solo son accesibles a través de la
esfera de la Luna. Debido a que la Luna es el planeta que mas cerca
esta de la tierra es considerada la puerta hacia esferas superiores
y hacia otros "planos," que en la Cábala y el Árbol de la Vida son
identificados con los demás planetas del sistema solar.
Debido a su gran influencia sobre los líquidos, la Luna es asociada
con el elemento agua, el cual es regido por el Arcángel Gabriel.
Para establecer contacto con este gran Arcángel y recibir las
poderosas influencias de la esfera lunar, se prepara el Néctar de
Levanah, que como ya les explique con anterioridad es el nombre
hebreo de la Luna.
La base de este elixir mágico se prepara batiendo una clara de huevo
con bastante azúcar y añadiéndole medía tasa de crema de leche. A
esta mezcla se le añade medía taza de vino blanco. El liquido
resultante es de exquisito sabor. Se vacía de inmediato en una copa
azul. En el mercado se encuentran copas azules con medías lunas que
son ideales para esta obra.
Luego de haber vaciado el liquido en la copa, se coloca en el fondo
una piedra de la Luna, que se puede conseguir fácilmente en las
tiendas de la nueva era o donde vendan cuarzos.
La copa con la piedra de la Luna se coloca cerca de una ventana
donde pueda recibir la influencia lunar y se rodea con cuatro velas
cortas plateadas encendidas en forma de cruz. La copa se cubre con
un paño azul oscuro transparente de nylón o de seda. Si la tela
tiene diseños de lunas o estrellas plateadas es mas eficaz aún La
copa se deja en su lugar por una hora. Al termina de este tiempo, se
descubre la copa y la persona se para frente a ella con los brazos
extendidos y dice:
"En Nombre del Creador del Universo, te pido, Oh gran Arcángel
Gabriel, que bendigas este Néctar de Levanah para que rebose con tu
divina luz. Permite que al tomar este elixir sagrado reciba dentro
de mi ser el gran poder de la Luna junto con tu bendición. Y que
esta energía celestial nutra mi cuerpo y mi espíritu y me de la
fuerza para vencer las pruebas y dificultades de la vida. Que así
sea."
La copa se toma entre las dos manos con gran reverencia y se toma
lentamente, sin despegarla en ningún momento de la boca. La piedra
de la Luna no se saca de la copa hasta apurar todo su contenido.
Este ritual da gran poder a la persona para resolver toda clase de
problemas. Se debe llevar a cabo en Luna nueva y Luna llena
solamente; si se hace continuamente, la persona desarrolla grandes
poderes psíquicos y establece una relación muy poderosa con Gabriel
y su propio ángel guardián.
antes de hacer este ritual, la persona debe asearse y vestirse con
ropas limpias, blancas o azules. El ritual se hace de noche y la
persona debe estar descalza y no haber comido nada por lo menos tres
horas antes de llevarlo a
cabo. Las mujeres que deseen llevar a cabo este ritual o cualquier
tipo de magia angelical pueden estar pasando por el ciclo menstrual.
Esta es una importante regla que siempre se debe tomar en cuenta.
Este es el ritual mas hermoso y poderoso que existe en la magia
Angelical. Para llevarlo a cabo es necesario abstenerse de comer
carnes, de tener relaciones sexuales o de tomar licor o usar ningún
tipo de drogas, incluyendo medicamentos, por tres días. Veinticuatro
horas antes del ritual la persona debe comenzar un ayuno durante el
cual solo debe tomar líquidos, que no incluyen café, té o licor
alguno. El ritual solo se hace en Luna Creciente, pero no en día
sábado.
Una hora antes del ritual la persona se baña y se viste con una
túnica blanca. Como siempre, debe estar descalza porque ante Dios y
sus ángeles los pies deben estar descubiertos.
El cuarto donde se va a llevar a cabo el ritual se rocía de antemano
con agua y sal de mar y luego se pasa incienso y mirra por todo el
ámbito.
Se coloca una vela blanca en los cuatro puntos cardinales de la
habitación y se pide la bendición y protección de Dios y sus
ángeles. Para este ritual no es necesario proteger el lugar con un
circulo mágico.
La persona se sienta en una silla de espaldar recto frente al Este
de la habitación, los pies uno al lado de otro. Entre las manos debe
tener un cuarzo blanco de dos a tres pulgadas de ancho, transparente
y de punta fina. El cuarzo debe ser purificado de antemano
poniéndolo en agua con sal de mar por 24 horas, luego enjuagándolo y
colocándolo al sol para reenergizarlo.
Para programarlo se coloca sobre el entrecejo y se le dice
mentalmente que atraiga hacia su dueño paz, amor, protección y
energía positiva y que actué como una conexión continua con el Ángel
Guardián. El cuarzo debe tomarse entre las dos manos, con la punta
hacia arriba.
En estos momentos la persona cierra los ojos, se relaja y comienza
una serie de seis pranayamas o respiraciones profundas. Mientras
hace las respiraciones, visualice un gran rayo de luz que baja del
infinito hasta el cuarzo, el cual multiplica esta radíancia y la
dirige hacia la persona. Esta se ve de inmediato envuelta en una luz
deslumbrante.
Tan pronto la persona se ve rodeada de esta luz, comienza a
pronunciar la letra D mentalmente con gran rapidez. Continua
repitiendo esta letra por varios minutos. Según repite la letra va a
sentir que se despega poco a poco de su cuerpo como si estuviera
flotando en el medio de la luz deslumbrante que la rodea.
Mientras repite la letra D, va a notar que frente a ella ha
aparecido una escalera resplandeciente de anchos peldaños dorados
que se eleva hacia el infinito y se pierde entre las estrellas. En
estos momentos, deja de pronunciar la letra y comienza ascender por
la escalera. Mientras asciende, comienza a respirar hondamente y a
contar del veinte hacia atrás: veinte, diecinueve, dieciocho,
lentamente. La respiración profunda debe acompañar al conteo. Por
ejemplo, respirar hondo y contar mentalmente, veinte; respirar de
nuevo y contar, diecinueve; respirar de nuevo y contar,
dieciocho...y así continuar, hasta llegar al uno. Esto eleva a la
persona al estado alfa y a planos superiores de conciencia.
Mientras cuenta la persona continúa ascendiendo por esta escalera
espiritual. Va a notar como se va elevando sobre la habitación,
luego sobre la casa y los edificios de la ciudad. Según asciende por
la escalera, va dejando atrás la ciudad, el país, y por fin la
tierra. A cada lado de esta escalera luminosa esta el espacio
sideral alfombrado de miles de estrellas.
Mientras asciende, continúa inhalando y exhalando y contando
lentamente.
De pronto, frente a ella, esta el orbe de la Luna, envuelta en un
halo de luz plateada. Es fácil observar los cráteres y valles
lunares mientras asciende por esta escalera dorada. La persona
continúa ascendiendo y de pronto, al llegar al termino de su conteo,
ve como la escalera desemboca en un fulgor resplandeciente. Entra
lentamente en esta luz refulgente y se encuentra frente a un gran
portal dorado. Esta es la puerta del cielo. Mentalmente, la persona
pronuncia con gran reverencia el nombre de su Ángel Guardián. De
inmediato, el portal se abre y la persona puede percibir en su
centro la figura luminosa de su Ángel Guardián. El ángel resplandece
con una luz enceguecedora. Sus grandes alas son mas blancas que la
nieve y su rostro, lleno de ternura, es de una belleza
indescriptible. Su técnica esta hecha de rayos de sol y su corona
esta formada de miles de estrellas. La persona se siente estremecida
de emoción ante esta visión celestial. El ángel abre sus brazos y la
persona entra en ellos. Poco a poco su ser se funde con el del
ángel. Su pecho, su garganta, su frente, y por fin todo su yo es
fundido en la luz del ángel. En estos momentos, la persona ha
alcanzado la unión total con su Ángel Guardián. Miles de destellos
dorados surgen de sus auras unidas y estos destellos forman un sol
deslumbrante que explota como una supernova en medio; de las
estrellas. La persona siente la esencia Y energía del ángel vibrar
en cada átomo de su ser. En estos momentos, pronuncia la Plegaria
del Ángel Solar, que es el Ángel Guardián de cada persona:
Ángel bienamado, luz de mi existencia es por ti que vivo, es por tu
clemencia, del amor de Dios, de su providencia recibo la gloria de
esta, tu presencia, en este momento de divina audiencia retira de mi
todas mis dolencias;
y cuando te vayas y sienta tu ausencia se quede conmigo, algo de tu
esencia
ángel bienamado, luz de mi existencia..
El ángel se va retirando poco a poco, su rostro divino lleno de un
amor trascendental. Pero en lo mas profundo de su ser. la persona
siente que aún esta con ella. Los portales celestiales se cierran
lentamente. Y todo es de pronto un foco de luz inmensa. De nuevo
frente a la escalera, la persona empieza a ascender por ella. Esta
vez ve como se pierde en el infinito hacia la Tierra, que se
vislumbra en el fondo del espacio como un orbe azul que da vueltas
continuamente. Mientras desciende cuenta de manera lenta, esta vez
del uno al veinte. Muy pronto se encuentra de nuevo en su entorno
familiar. Siente de nuevo el peso de su cuerpo sobre la silla. Abre
los ojos y da gracias a Dios y su Ángel Guardián por la gran
bendición y gracia que acaba de recibir. El cuarto se recoge, las
velas se apagan y no se vuelven a usar. El cuarzo se guarda para
usarlo en otra ocasión.
Este ritual es de gran poder y es tal vez el mas importante que una
persona pueda hacer en su vida. Da gran paz, sentido de balance y
fortaleza ante la vida, y sobre todo establece una unión total y
permanente con el Ángel Guardián.
Esta oración que es una invocación todas las huestes celestiales,
congregadas en los Nueve Coros Angelicales, que como hemos visto
antes son, en orden de poder y magnitud, los siguientes: Serafines,
Querubines, Tronos. Dominios, Poderes o Potencias, Virtudes,
Principalidades, Arcángeles y Ángeles. Esta oración se hace en
momentos de peligro o cuando se desea establecer contacto con los
ángeles y pedir algo importante. Si se reza a diario da protección
continua a quien la hace, a su hogar y seres amados.
"En nombre del Creador del Universo
Y el Coro Angelical, de Espíritus Excelsos:
Brillantes SERAFINES, de fuego y de rubí,
Rodeen mi persona, traed amor a mi.
Poderosos QUERUBINES, que brillan como el sol,
Alejen de mi el odio, la pena y el dolor.
TRONOS, sed firmes, sed estables con alas de cristal,
Y estable mantenedme, en tierra o en el mar.
Yo invoco a los DOMINIOS, en justa invocación
Que sea yo siempre justo(a) en toda decisión.
y pido a los PODERES su luz y protección
Salvadme del peligro, del mal y la traición.
VIRTUDES milagrosas, flotad cerca de mi
Que la virtud me guíe, venid, venid aquí.
Las PRINCIPALIDADES, traed la paz al mundo
Que sea bendecido, en éxtasis profundo.
ARCÁNGELES gloriosos,
guiadme en el camino
Que hacer la caridad, sea siempre mi destino.
Oh ÁNGELES divinos, que servid al Creador
Que así también yo sirva, en luz,
en paz y amor".
Amén.
Desde 1990 la Gran Fraternidad Blanca está
limpiando el karma de la humanidad.
Como el 50% de este karma ya fue eliminado, confirmamos que las
hadas, los duendes y los elfos entre otros Seres Elementales, son
los llamados obreros de Dios, seres que tienen como misión mantener
el orden de la naturaleza.
Si quieres saber mas de estos maravillosos seres puedes visitar mi
Rincón de Las Hadas y
Los Duendes.
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